miércoles, 9 de abril de 2014

Amparo 2, Cáncer 0

Hoy me han dado el alta, después de seis años. Tendré que acudir a revisiones anuales durante mucho tiempo, pero se acabó esa medicación tan buena pero tan tóxica que me ha sentado como un tiro. Fin de una etapa. Espero haber terminado (bueno, en unos meses) con las náuseas, los mareos, los dolores en los huesos que algunas veces no me dejan caminar veinte metros seguidos y tengo que buscar un lugar donde sentarme, con la incertidumbre de la noche anterior a que me den el resultado de las pruebas... 
Al salir de Vall d'Hebron el sol me ha calentado la cara; lo he tomado como un buen presagio.