sábado, 31 de diciembre de 2011

A 24 horas de 2012

Nunca sé como va a ser un año hasta que termina. Para mi, mujer afortunada, 2011 ha sido mucho mejor que 2010. Crisis, cambios políticos, meses que no llegan al final del sueldo, nueva ración de hospital... Pero también reencuentros emocionantes, nuevos proyectos, crecimiento personal y la estabilidad que siempre me proporciona mi gente. 

A 2012 le pido ser suficientemente valiente para no callar ante las injusticias y lo bastante lúcida para reconocerlas a tiempo. Y también espero que me permita seguir al lado de los que quiero.
Te deseo un feliz año nuevo conmigo.