jueves, 25 de agosto de 2005

Se non è vero, è ben trovato

Como al dejar de fumar lo único que hago es dejar de fumar, he encontrado un artículo de Vargas Llosa sobre el asunto. Las luminarias del departamento de "lo estoy dejando" del Hospital de Sant Pau (Barcelona) también le clasificarían a él como toxi, supongo. Anda que si llegan a conocer a Poe les da un algo.

El artículo lo publicó El País (20.07.2000) y yo lo encontré arrebujado en sololiteratura.com, excelente web por cierto.

Jordi Tanaka

Así se llama el médico de cabecera suplente de la médico habitual de mi madre. Hoy ha estado en casa, porque hace unos diítas que estamos un poco agitadas y doloridas, así que he llamado a la Sanidad Pública, principalmente por compartir el agobio. Y, voilà, Tanaka ha entrado en nuestras vidas. Además de japonés y médico es hombre, tremenda combinación, con lo que insistía en explicarle a mi madre lo de sus vértebras chafadas radiografía en mano, una y otra vez. Yo, que la conozco bien, veía como, con la mirada, ella intentaba transmitirle "dame la morfina y ¡lárgate!", y, claro, he tenido que pedirle que diera por dadas las aclaraciones sobre osteoporosis y sus circunstancias y pasáramos sin más dilación a escribir recetas y más recetas. Bueno, todo este rollo es el preámbulo para contar que Tanaka, arrojado como pocos, me ha dicho que he de perder peso. A ceja alzada le he contestado que acabo de dejar de fumar y me lo como todo pero él, impasible, ha insistido. Le he respetado por su edad, por su cultura milenaria y porque no tengo ni idea de cómo deshacerme de un cadáver.

domingo, 21 de agosto de 2005

El tango se equivocó

Veinte años lo son todo, y como prueba el Velvet, un local que era lo más cuando yo era joven y socializaba. Pero lo más hasta el punto de tener un portero que seleccionaba quién iba a tener el honor de divertirse dentro, práctica común a finales de los 80 y durante los 90. Ahora sigue yendo el mismo público con la diferencia que sí pueden entrar los que antes se quedaban en la calle. Fauna y flora, de todo hay. ¿Qué por qué he acabado ahí? Porque celebrábamos que Xavi ha entrado en la treintena (durante la cena me recordó que le conocí a sus 24) y hoy Velvet era una buena opción para tomar la primera. En fin, público peculiar aparte, he aguantado casi una hora. Es tan difícil socializar sin un cigarrillo tras otro... Porque, las cosas como son, a mi me ayudaba mucho trasegar camels en situaciones así, donde estás con muchas personas pero con ninguna en especial y hablas y dices y cuentas pero sin sustancia. Total, que cuando ya no podía aguantar más sin fumar me he largado corriendo y aquí estoy, poniendo por escrito lo mucho que me cuesta codearme de noche con otros humanos sin mis adoradas y cancerígenas muletas. Menos mal que ya estoy en casa. Voy a ver si logro narcotizar al mono y me calmo y que mañana sea otro día.

viernes, 19 de agosto de 2005

Masoquista pero feliz

Ayer vi una película excelente, Smoking Room, que en los Goya 2003 tuvo la mala suerte de competir con "Los lunes al sol" y "Te doy mis ojos". Smoking Room se llevó el Goya de mejor director novel. El guión debería ser de análisis y estudio obligatorio en tooooodas las academias de cine del planeta.

222

no es la galleta que se pide por su número, sino los 2 meses, 2 semanas y 2 días que llevo en dique seco. E insisto en comentarlo porque estoy en medio de una crisis. Reitero que no es un deseo incontrolable de fumar, sino de no haberlo dejado. A tal estupidez sólo puedo contestar que en ese caso tampoco existiría deseo, por lo tanto no sé de qué estoy discutiendo con Hyde. Oh, como me irrita liarme en discusiones desdobladas que no llegan a ninguna parte.

Otra cosa que quería dejar por escrito es que hoy he tocado fondo. Como mami me pide drogas nuevas casi cada día he vuelto a la farmacia y (oh) me he comprado una caja de chicles saciantes. En el prospecto he leído que son muy aconsejables "durante los procesos de cesión tabáquica". ¿Quién será el imbécil que redacta los textos técnicos de lo que sea? Un eufemista ¿se hace o nace? Así que no he dejado el tabaco, sino que he procedido a cesar el consumo. Vale, pues sigo acusando un primate igual o superior que antes.

miércoles, 17 de agosto de 2005

Mataré al mono

No hoy, ni mañana, pero un día de estos le pillaré distraído y le daré un mamporro que le dejaré seco. Porque me tiene frita la criatura. Hace unos diítas que visualizo un cigarrillo. Y el enganche gestual que creía superado no lo está aún. También es cierto que paso por un momento un poco tenso: madre accidentada, tareas domésticas que me salen por las orejas, panorama laboral incierto inciertisisimo... Vale, no estoy instalada en Nirvana precisamente, pero ya hace dos meses y medio que lo dejé y aún veo cigarritos. Ah, me olvidaba. El otro día, mientras iba a la farmacia de guardia, me descubrí apartando la mirada del rótulo del estanco, como si temiera cometer un acto pecaminoso. Estoy fatal. Necesito machacar al maldito mono. También necesito dejar de comer, dicho sea de paso.

viernes, 12 de agosto de 2005

Chispazos

O coletazos, o latigazos, llámale como quieras. Desde hace una semana o así me acuerdo del tabaco de forma intermitente. Ya se que es una tontería como una casa, pero no puedo evitarlo. El miércoles estuve en urgencias de Cruz Roja por un mal materno y me sentí muy bien, muy "buena hija" porque podía quedarme en la sala de espera mientras le hacían pruebas, en vez de salir desesperada a fumar con la angustía de calcular mal el tiempo y arriesgarme a que me llamasen por megafonía y yo fuera, narcotizándome y dando una imagen pésima, de hija desnaturalizada.
Tengo ganitas de fumar, o de no haberlo dejado Y sigo comiendo como un tiranosaurus regina. Empiezo a estar inconmensurable.

sábado, 6 de agosto de 2005

Se acabó

Terminé con el ayuno. Dicen que da claridad mental, pues debió ser la luz que me entró directa a las meninges la que me alertó de estaba haciendo el canelo. ¡Qué hambre, madre mía! He aguantado cinco días como una reina, ya no me quedan toxinas vivas en mi cuerpo y hoy he vuelto a alimentarme de forma sana y natural, y no como en estos últimos tiempos.
Fruta, cereales integrales, mucha verdura y mucha agua. Ah, y una caminata a paso ligero atravesando Barcelona, de mi casa a la de Duaita. ¡Hala! Tres cuartos de hora de la una a la otra. He llegado, he jugado con los gatos (bueno, con Sadie, porque Max se ha tumbado en un rincón y no me ha hecho ni caso), me he desparramado un rato en el sofá y he regresado en bus. Si sigo así una temporada volveré a tener un peso razonable, dejará de dolerme la rodilla y la espalda y no tendré que comprarme ropa nueva.
Ventajas del ayuno: estaba tan obsesionada con la comida que olvidé por completo el tabaco.
Ayer estuve dando vueltas por webs y blogs sobre tabaco. En verdad os digo que los extoxis estamos más allá que acá, aunque eso sí, la obsesión de dejarlo nos une, seamos de donde seamos. Todos tenemos las mismas neuras, las mismas aprensiones y el mismo temor: ¿seré capaz? Yo no lo dudo. Y por lo menos esta vez no caeré en el error de hace 16 años: "bah, por uno... ".

viernes, 5 de agosto de 2005

Marta deja de fumar

Hoy los oncólogos le han dicho que el tumor ya no está, que se ha largado harto de tanto rayo y tanta química y la reina, aprovechando la buena noticia ha empezado la terapia-cuenta atrás para dejar de fumar. ¡Por fin! En cuanto las dos podamos volver a comer como las personas (ella por las secuelas del tratamiento y yo porque estoy tarada y ayuno) iremos a celebrarlo por todo lo alto.
Hoy es un gran día ;-)

jueves, 4 de agosto de 2005

Oe Oe Oe Oe, Oeeee, Oeeeee

Soy la mejor y no porqué yo lo diga, que si que lo digo, sino porque a las pruebas me remito:
Dos meses, 2 días y 13 horas.
2543,29 cigarrillos menos y 305,19 euros más.
Lo de los diecinueve céntimos lo entiendo, pero lo del 0,29 cigarrillo... Igual será por el que me estaría fumando ahora mismo. Igual sí.
Bueno, pues no se acaba aquí la cosa. No sólo dejo de fumar, sino que dejo de comer.
Así escrito parece que me esté preparando para desparecer del planeta, cuando en realidad estoy haciendo una dieta de desintoxicacion. En breve no quedará una toxina viva en mi cuerpo de aburridas que están, y porque la dieta se basa en, a saber: NO COMER NADA, sólo tragar un brebaje que se llama sirope de savia, mezclado con limón y agua. No paso hambre, pero tampoco recomiendo que se me acerque un desconocido, aunque sea para regalarme flores. Hoy es el cuerto día del ayuno. Los dos primeros los pasé durmiendo. Bueno "durmiendo", se me caía la cabeza como a la niña del exorcista cuando ve el rosario por primera vez. Además, me doy cuenta de los millones de anuncios de comida que pasan por televisión. Uno de mis preferidos lo pasan en un teletienda de madrugada; un robot que pica, mezcla, muele ¡de todo hace la cosa! Y luego los yankies gorditos untan todo en enormes tostadas, o se lo comen a pelo. ¡Pues ahora no lo puedo ni ver! Mi mando a distancia va como loko buscando anuncios de perfumes, de juguetes. Hasta añoro los de los cuadernos de verano de Santillana... Ayer salí a la calle, porque tenía una entrevista de trabajo. Y hoy no he salido aún, pero he socializado mucho por teléfono. He hablado con Vicens, con Mercé y con Isabel, en este orden. En breve vuelvo a la vida civil pero me temo que usaré este diario para exorcisar los malos pensamientos que me vienen respecto a la comida. Mi augusta madre hoy me ha sorprendido comiéndose medio pollo a l'ast (con 82 años que tiene el angelito.) Eso sí, en la nevera tiene un donut light. Es la bomba. Es esto de los desórdenes alimentarios tiene alma de quiceañera estragada.
Dos meses sin fumar, cuatro días sin comer. Oe Oe Oe Oe, Oeeee, Oeeeee.