Estupendo bocadillo de chistorra. Como no me ponga frugívera este finde, en breve no pasaré por las puertas.
Qué curioso. A pesar de la chistorra, sigo mareándome como un pato. Y continuo odiando a todo el mundo, principalmente al mundo que fuma o que me habla, o que quiere que le preste atención. Tengo mucho sueeeeeño. Más de lo normal. Y cero ganas de mover un dedo. A ver cómo capeo lo que me queda de tarde.
No hay comentarios:
Publicar un comentario