desde octubre que estaré más concentrada en no fumar en el camerino que en salir a escena. Un compañero de teatro, en un rapto de generosidad, prometió intentar abstenerse. No habían pasado 12 horas del rapto cuando me envió un sms diciendo que iba a ser que sí, que de no fumar nada de nada. Es curioso, ahora que lo pienso de los siete que estaremos embutidos en el camerino sólo fuman dos. A eso le llamo "franca minoría". Menos mal que uno es ducados y el otro nobel, que si no igual me daba un ataquito. Después del teatro, fiesta de cumpleaños en un ático con terraza, vieja conocida donde he llegado a fumar lo que no está escrito. Me espera una verbena preciosa.
1 comentario:
Amparo, tengo una duda ...este tal Vicens que ha hecho este comentario es el mismo Vicens con el que hablas por teléfono antes de hablar conmigo y con Isabel?? Parece que te haya "encontrado", como si no te conociera antes de ver el blog, sí? Nada, curiosidad.
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